Estudio analiza la actividad de la ultraderecha en Telegram durante segundo proceso constituyente y detecta altos niveles de xenofobia y teorías conspirativas

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El informe financiado por la organización internacional The Atlantic Council, contó con la participación de Marcelo Santos y Valentina de Marval, investigadores de la Facultad de Comunicación y Letras UDP, y concluyó que es riesgoso que la ciudadanía use este tipo de grupos de conversación como fuente de información contingente, pues en ellos no se muestra un compromiso con los hechos.

26 / 04 / 2024

En países como Estados Unidos, Telegram es utilizado por segmentos de ultraderecha para movilizarse, informarse o relacionarse, pero ¿qué pasa en Chile? Un estudio financiado por la organización internacional The Atlantic Council y liderado por Marcelo Santos, académico e investigador de la Facultad de Comunicación y Letras de la Universidad Diego Portales, y Guillermo Bustamante, de la Universidad de Los Andes, realizó un primer acercamiento al uso de esta herramienta en Chile durante el segundo proceso constituyente, uno de los hitos de mayor polarización política desde el retorno a la democracia.

La investigación, que también contó con la participación de la académica de la Escuela de Periodismo UDP Valentina de Marval y los estudiantes de la misma escuela Benjamín Puentes, Paulina Geldres y Antonia Flores, realizó un mapeo de grupos y canales de orientación marcada hacia la derecha política chilena, caracterizando el tipo y los patrones de información política que circulan en estos espacios de conversación y con especial foco en la desinformación.

La metodología de trabajo involucró una búsqueda por palabras clave usualmente asociadas a ambos extremos políticos en Chile, para así identificar los grupos públicos ligados a ambas ideologías. Esta búsqueda resultó en escasos grupos asociados a la izquierda en la plataforma, lo que confirma en Chile la tendencia internacional.

La muestra final fue de 82 grupos y canales, que fueron analizados para identificar la temática principal. Finalmente, solo en 42 de estos (11 grupos y 31 canales) se identificó que la temática principal de conversación era política. Se identificaron los textos más difundidos y la frecuencia de repetición de cada mensaje por cada grupo. Luego se codificaron los mensajes por tipo de contenido político, según las siguientes categorías: información, movilización, desinformación, opinión, creativo, incivilidad. Todo aquello que se identificó como posible desinformación fue verificado por una profesional de fact-checking chilena familiarizada con el contexto y el tema.

El equipo de investigación observó escasa circulación de información política en la plataforma, pero con un componente importante de desinformación. Entre los principales hallazgos destacó la predominancia de contenido de tipo “opinión” por sobre “información” concreta, así como la alta concentración de contenido desinformativo, en particular que no puede ser chequeada, como teorías conspirativas, antivacuna, antiglobalización y especulaciones hacia el futuro. Asimismo, se detectaron altos grados de incivilidad, en especial xenofobia dirigido particularmente hacia la población migrante venezolana. Llamó la atención además que el contenido desinformativo con mayor adherencia en la muestra de grupos es un llamado a una nueva intervención militar en Chile.

En base al comportamiento observado en la red social, el estudio concluye que se demuestra “lo riesgoso de que la ciudadanía use este tipo de grupos de conversación como fuente de información contingente, pues los datos muestran que en ellos no hay un compromiso con los hechos; por el contrario, predomina la opinión, que se mezcla con la circulación de contenidos con componentes de teorías conspirativas y elementos imposibles de verificar, los que suman entre sí un ecosistema no sólo pobre, sino que dañino para la información política”.

Para revisar el estudio completo, puedes ingresar al siguiente enlace: